Marte, el planeta floreciente que fue destruido por el capitalismo salvaje, según se dijo en algún momento de nuestra historia contemporánea, ha vuelto a ponerse de moda. Hay agua -que es mucho más de lo que puede decirse de nuestros supermercados- y a cada momento se encuentran nuevas evidencias de que sin duda ese planeta será la tabla de salvación para que la civilización terrícola encuentre un nuevo hogar. Parece que es mucho más fácil -y hasta barato- habilitar un nuevo planeta que arreglar este. Con una emigración al planeta rojo controlada y selectiva, quizá el ser humano encuentre un lugar seguro de paz, sin guerras ni terrorismo, sin crímenes ni hambrunas.
Qué misterio el de la humanidad. Cuentan los astronautas que cuando observaban a La Tierra desde el espacio, toda ella era su casa, independientemente de si habían nacido en Ohio o contentos. Somos los terrícolas, salimos de las cavernas, construimos civilizaciones y mientras más inteligencia alcanzamos, contradictoriamente, más peligra nuestro destino. Por eso exploramos otros mundos, somos inquietos buscadores. Conquistaremos el universo, sin duda. No es descabellado imaginar el final de nuestro planeta, no como consecuencia de la explosión del sol o algún inoportuno asteroide, seguramente seremos nosotros mismos los autores del desastre y al final una nave de la NASA al estilo de la serie «Viaje a las estrellas» abandonado el planeta con una selección de humanos previamente entrenados que se dedicarán a viajar por el espacio infinito en búsqueda de nuevas fronteras. En ese tiempo seguramente Marte ya será una colonia.
La tierra será entonces una hecatombe de fundamentalísimos, terrorismo y narcotráfico, las grandes fuerzas emergentes de este tiempo. Bombas nucleares en poder de fanáticos irán explotando hasta contaminar la atmósfera terrestre y no quede nada. Vientos huracanados borraran todo rastro de civilización hasta que algún día otro planeta estudie nuestro suelo y observe con asombro que quedan rastros de agua y que algunos microbios sobrevivieron y que quien quita que alguna vez haya habido vida en ese misterioso planeta oscuro. Para ese entonces, los que se fueron tendrán un vago recuerdo de aquel maravilloso lugar del que salieron. La reprogramación dirigida de sus mentes para adaptarlos a la vida espacial y al claustro de los viajes interestelares, habrá borrado de su cerebro todo recuerdo de que una vez habitaron un planeta azul. Quien quita que un gen venezolano vaya en esa nave. Compatriotas nuestros que son auténticos genios ya trabajan en la NASA.
Particularmente creo que los venezolanos de este tiempo, sin saberlo, ya estamos entrenando para este viaje que dura alrededor de tres años. Por estos lares, la gente sale de su casa lo menos posible, como consecuencia de la inseguridad y eso nos está ayudando a acostumbrarnos a vivir en ambientes cerrados. Las fallas en el suministro de agua enseñan a bañarte con totuma (¡sabrooooso!) con el menor gasto del vital líquido. El entrenamiento en la ausencia de papel de baño, también nos ayuda a sobrevivir en este viaje tan largo donde toda la higiene íntima funciona por aspiración. En un vuelo a Marte hay que olvidarse del champú del desodorante aerosol y del jabón. No creo que ningún otro terrícola este tan preparado como los nosotros. Estamos capacitados para sobrevivir a las mayores adversidades e incluso a sacar provecho de aquello que acabaría con otros seres humanos.
El lector se preguntará: ¿y qué tiene que ver todo esto con el grave momento que vive el país?
Respuesta: ahhh, mucho, y es que si no votamos el 6 de diciembre y tratamos de evitar el desastre en el pedacito de planeta que nos toca, quizá en verdad tengamos que irnos a Marte, pero no en el Enterprise en un futuro lejano, sino el año que viene…y en bicicleta.
Entre más inteligencia y más raciocinio, más destrucción, que cosa sería es la raza humana.
Que triste! comenzando a leer este maravilloso escrito ya sabia que Laureano se iba a referir a nuestro lamentable sistema de vida (subsistir), sin embargo ya lo escribió, tenemos una extraordinaria oportunidad este 6D para manifestarle a este gobierno que los que se van a montar primero y no es en el Interprise serán ellos para mandarlos pal cara… aprovechen este desembarque porque nos embarcaron!
En bicicleta no. Son capaces de prometernos que van a construir un metro galactico para llegar alla.
Es muy cierto, los que hemos emigrado nos ha tocado ver a nuestro país de origen como esa tierra lejana y hermosa. Cerramos los ojos y recordamos las cosas buenas, las malas las leemos por tweet re o en el Facebook de familiar i amigo. Laureando eres muy acertado en tus comentarios y arrancas una sonrisa triste de los que te leemos. Dios te bendiga y sigue adelante.
Dios bendiga a Venezuela y que ilumine a los que aún creen que los actuales son la solución y les permita ver que son el problema
Claro, «a-marte Venezuela», eso es lo que puede salvar lo poco que queda. Gracias por motivar a la gente a votar cada viernes, aunque tengo la certeza de que la gran mayoría de los que se pasan por aquí están decididos a votar si o si.
Para todos; muy buen día. Como siempre L nos sorprende con tanto ingenio y voy a utilizar «inventiva» pero que de invento no está diciendo nada…es la pura verdad. Me encantó como siempre todo el escrito y la inevitable parte de reír que para mí sería » lector se preguntará: ¿y qué tiene que ver todo esto con el grave momento que vive el país?» Tal parece que la situación es fuera de este planeta…aún con las observaciones de Laureano; el primer paso será acudir el 6D y pensar Si ya es difícil para muchos vivir fuera del País sin los afectos; que será en Marte. Me despido con un abrazo inmeso desde aquí a Marte. Att: Yo.
Humor apocalíptico con toque de advertencia….Muy buen artículo.
No es uno de sus mejores editoriales y, extrañamente, tiene varios errores en la redacción. Sin embargo mi fanatismo me impulsa a compartirlo. Y aunque a lo que más le temo es al triunfalismo yo creo que el mensaje debería extenderse a IR A VOTAR y a AYUDAR A RECONSTRUIR.
La vergüenza que obligatoriamente debe endosársele a todo venezolano que no se conecte con la profundidad de esta realidad. Aquí están en juego los valores esenciales de la vida de una nación afectada por un desequilibrio de profundidades aterradoras. Ojalá Laureano, logremos motivar a aquellos que prefieren quedarse como los que tuvieron que permanecer inmóviles en el Titanic esperando el hundimiento total y encomendándose a Dios. Aquí todavía quedan botes y salvavidas.
¡Gracias Laureano Márquez, Gracias!
Cuanto te pagan por llevarlos a votar?
Aunque comienza como algo gracioso, muy serió el tema de Laureano, hay que reflexionar sabemos que el futuro de esta hermosa tierra comienza por el voto del día 6, y que todo lo escrito no esta lejos de una realidad muy próxima si no colócanos nuestro granito de arena día a día
Laureano, tú ,además, tienes el apellido idóneo para que con un mínimo de cambio se adapte al nuevo planeta. Puedes pasar a llamarte, sin mayor pérdida de identidad, Laureano «Martes» y tranquilo. Así que lo tienes todo: el entrenamiento en condiciones extremas y el nombre apropiado.
Pero la cosa luce como que a pesar de tener viento a favor, te emperras en quedarte en la tierra, y más emperramiento aún, en tu tierra. Eso sí que es obstinación.
Comparto la terquedad, y si el ticket es afincarse en otro día de la semana, que sea el domingo 6D. (Si miramos la fecha como un emoticón hasta nos sonríe…será un mensaje de Delfos?)
Nos vemos en la única cola que aplaudo, en la que piden la huella y bañan al meñique.
Vivo en Colombia ,pero sigo muy atenta sus maravillosos escritos.Y a pesar de mi tristeza (motivos personales)no dejo de admirar la fluidez de su pluma.Dios lo bendiga y proteja y a la victoria el 6D.
Querido, respetado ,imaginativo y muy acertado GENIO Laureano Marquez, gracias por ser tan acertivo con tus escritos, no me regocijaba tanto con las lecturas inteligentes desde que lei a Julio Verne… Ya sus azañas se han cumplido , seguro que vuestros deseos son los mismos QUE LA MAYORIA Inteligente y Poblacion alexionada que «creyö en Idolos de Barro..» como la mayoria lo hemos hecho.. Que DIOS Y LA Virgen te bendigan y sigan dando muchos años de genialidad, humor y amor por todos. Amen.
o a Europa 🙂 Uf!!! que dura realidad sino se sale a votar. Yo confio en que la mayoria apostara a la reconstruccion del pais y no a la alternativa de ir en bicicleta a Marte. Esta triste realidad , la estamos viviendo en estos momentos aqui, en Europa, donde muchas personas apostaron por un mundo mejor pues el de ellos se les hizo imposible. A pesar de las buenas intenciones y la tolerancia de los pueblos europeos frente a la avalancha de desplazados que llegan dia a dia, la idea de buscar ayuda no es en el fondo una buena alternativa para el bien comun,ni de un lado ni del otro. En pocas palabras, creo que se nos destino un pedazo de tierra en este planeta, y somos responsables de cuidarlo y heredarlo en buenas condiciones. Aun estamos a tiempo , no abandonemos nuestra casa…Venezuela. Lo lograremos….hay que salir a votar.
Excelente ese viaje a Martes , pero es mejor quedarnos con nuestra Tierra, solo saliendo a votar el 6D, y para un Purgarcito , que pregunta cuanto te pagan por llamar a votar, a ese le daremos el viaje a Martes gratis.Felicitaciones Laureano por este articulo.
Si no ejercemos nuestro deber, no sera en bicicleta, sino en cola, como d costumbre…
Como siempre las reflexiones de laureano y su estilo, penetran, en el Corazón de los que queremos a nuestro pais y en casi todas nos invita a que salvemos a la patria de la catástrofe en que está sumida.el 6D es el día de la salvación.vota……. làstima que éstas reflexiones no lleguen a la población de los que todavía creen en los pajaritos del difunto y sus herederos.
Laureano, soy de Argentina, y hoy te vi por primera vez en stand up sin fronteras del Comedy Central Chanel. Sos muy bueno, qué talento! Inteligente, incisivo, humor sin groserías, y efectivo! Ahota, buscando más data de tu biografía, encuentro tu página y este editorial. .. qué decir, genial! Y como Argentina, debo decirte que la realidad venezolana nos toca de cerca, pero también tenemos la oportunidad de cambiar, y creo que esta vez la gente no se va a dejar seguir engañando, y es seguro que este 22 de noviembre en el balotaje que nos toca, triunfa el grito de Basta! Espero que Venezuela también salga de su triste situación. Saludos!
Bien lauri x ese artìculo
Creo que a mí, solo me toca a-marte a ti